Por Fabio Herrera
En días como el de hoy en el que pareciera
que un dictamen se hubiera modulado para que todo flotara al lado mío,
así, en complicidad pero al descuido,
en días como el de hoy
siento el quedo maravilloso de la complexión
y la cúspide imposible
los pasos del animal más delicado de todo el universo
presionando mis huesos de escalera
y esa lejanía con los lutos del corazón
que a veces tanto me golpean.
En días como el de hoy se me hace tarde
pero te transporto conmigo y cada instante tiene un poco de vos
de la mañana en que te conocí
y de los brillos estelares que siempre han sido tus ojos
de tu esqueleto de pan fresco
de tu diafanidad boca de mimbre
y tu voz, serena recurrencia
los trinos de la causalidad
sonando en mi pecho como un timbre.